jueves, 19 de noviembre de 2015

La revisión de los 12.000 kilómetros

Llegué con casi 500 kilómetros de más a la revisión de los 12.000 ya que tuve que utilizar la moto por diferentes motivos. El único problema existente eran las vibraciones del eje delantero al frenar que me ocurrieron en el viaje de la transpirenaica. 

Por otra parte los neumáticos presentaban un desgaste ya prácticamente en los avisadores de los mismos, desgaste que se acentuó de manera diaria en el viaje. 



domingo, 15 de noviembre de 2015

Transpirenaica. Etapa 4

Viernes 16 de octubre de 2015

Amanece en Jaca. La previsión era fría y menos mal que me acordé de sacar las botas del balcón y ponerlas al lado del radiador del baño para que estuviesen calentitas. Me cuesta desperezarme porque las mantas no ayudan, aunque no ha sido todo lo confortable que me hubiese gustado, el colchón tiene un aprobado raspado.



Bajé a desayunar y acostumbrado a los buffet de los dos últimos días, un cola cao, un minibocata de jamón y un pequeño croissant no son suficientes para un tío de un metro noventa. Más adelante comeré algo.



Preparo la moto y la dejo calentando frente al hotel mientras entablo conversación con el recepcionista que estaba de mañana, al que le cuento un poco la ruta, de donde vengo y a donde voy, algunos detalles que tengo pensados y la ruta que me tocaba ese día. Un tipo muy simpático que me da algunos consejos de la zona y me desea buena ruta, un rato agradable y la moto, ya más que caliente pidiéndome paseo.


jueves, 12 de noviembre de 2015

Los bailes del top case

No se muy bien el motivo pero el top case, baúl, top box, maleta (o como quieras llamarlo) de la honda crosstourer, modelo 2014 hacia atrás y por tanto el ampliable con cremallera, se mueve lateralmente unos ligeros centímetros. Viene así en todas las Cross que lo montan. 


domingo, 1 de noviembre de 2015

Transpirenaica. Etapa 3

Jueves 15 de octubre de 2015

Vielha es un valle, así que el sol tarda en levantarse y asomar en lo alto de las montañas. Ya sabía yo que haría frío y tampoco me importaba remolonear mucho. Abrí la ventana y efectivamente, a las ocho de la mañana sólo se escuchaba el río Garona correr, ese río que corre de Sur a Norte, desde el pico Aneto hasta el atlántico de territorio francés.

Bajé a desayunar. El hotel Ribaeta estaba perezoso y el único madrugador era yo. A poco que elegí cosas del buffet y me senté, vino Asier a preguntarme si deseaba café. –Leche caliente por favor-, elegí que el cola cao sería mi calentador matutino y con el canal 24 horas haciendo de compañía, desayuné tranquilo y caliente. Los cristales de los coches aparcados en la calle no lo estaban pasando tan bien.

Buenos días. ¿A que hora amanece por aquí?